martes, 1 de junio de 2010

Alergia

El aire quieto, pesado, inrrespirable casi. La luz que atraviesa el espacio deja entrever un polvo que flota lento de abajo arriba, de arriba a la izquierda, de la izquierda hacia arriba y así aleatorio. El sonido que ese espacio presentaba era un espectáculo reiterativo e insoportable: un ladrido en la calle, algún auto que pasa también en la calle, y aquí en el living por dios… el tic tac del reloj y el depósito del baño llenándose en la pared. Mi espalda está apoyada contra la pared y mis dedos tensos suplican, el resto del cuerpo piensa que está cómodo sentado en un sofá cama. Sofá cama de plumas, con ácaros, con pelos de perro… que poca inteligencia tenemos los alérgicos a veces. Intento pensar en algo para distraerme, pero me pica la nariz e interrumpe el pensamiento. ¿Qué era lo que quería pensar? Ah si… esa historia: “El tipo era un marciano en realidad, pero había quedado estancado en la 9 de julio como todo el mundo”, me invade la nariz la hija de puta, no vengas no vengas no vengas, por favor no vengass… “¿Qué es lo que hace un marciano parado en la 9 de julio? Estancado se queja del transito de siempre de este país de mierda. No no, no tiene sentido boludo, ¿que país de mierda? Si este ni lo conoce, viene de Marte”, Me empieza a picar la nariz de nuevo… “no te rasques”. Me pica me pica, me rasco la concha de la lora.

“El marciano esta parado en la 9 de julio en un Ami8, o en un Renault 12. Un gordo al lado en un Taunuss lo mira con cara de mal almorzado y levanta las cejas como tirando un eterno dictamen acerca del transito en Buenos Aires. El marciano devuelve el mismo gesto, ¿Cuáles son sus intenciones? ¿Se comerá al gordo mal almorzado? No sabe, rasca el volante con ansiedad, el semáforo cambia mil veces de rojo a verde, de verde a rojo, el transito no avanza. Idiotas tocan bocina, el gordo también, el gordo también, el gordo también, el gordo además de también ahora putea y dice aquel dictamen de la ceja pero en voz alta. El marciano comienza a tener Hambre, Hambre de gordos mal almorzados. No para de pasar gente por el medio de los autos, bicicletas, bocinas, puteadas, criticas idiotas, Hambre Hambre Hambre, comer un humano… uno solito, un gordito mal almorzadito pensará el marciano en medio de este embotellamiento en la 9 de Julio. El gordo empieza a putear no para de putear no para de putear, gordo de mierda cállate le grita el conductor de un Torino que está atrás. El gordo se calla pero empieza a respirar fuerte y a hacer tics con la cara y el cuerpo. Listo, el maricano no puede mas, se está muriendo de tentación. No pueden ponerle tal plato enfrente, cuanto más molesto el gordo, más hambre le da al Marciano. Y casi aporteñado en un gesto dice masi yo me lo morfo a este. Levanta el piquito del Ami 8 o Renault 12 todavía no se, abre lentamente la puerta mientras su mirada se clava en el gordo mal almorzado, un pie luego el otro permiten que baje el cuerpo del marciano a la calle, al asfalto de la estancada 9 de julio. El gordo aumenta los tics mientras mira la desorbitada y transpirada cara del marciano que comienza a transformarse. A acercarse, con ganas, con hambre. Baba, espuma en la boca, la mano se acerca a la puerta del gordo del Taunuss, el gordo mal almorzado entra en pánico pero no tiene a donde huir. Abre la puerta el Marciano, el gordo grita AAAaaaaaaaaaa” ACHUUUUUUUUUSSSSSSS!!!! La concha de la lora y la reputa madre que lo pario con esta alergia de mierda.

1 comentario: